MARI MAYANS Hierbas Ibicencas

Conocidas las excelentes propiedades de las plantas aromáticas, los campos de Ibiza y Formentera, debido a su variedad de microclimas que se forman por su peculiar orografía, aporta niveles de mineralización y humedad especifícos. Esto hace que las aromáticas cultivadas y las nacidas de forma silvestre en Ibiza y Formentera, tengan propiedades especiales para el consumo humano.

ELABORACIÓN

PROCESO ARTESANAL
DESDE 1880

Las hierbas ibicencas se elaboran siguiendo las recetas manuscritas de Juan Mari Mayans, creador del licor y fundador de la primera destilería.

Se obtienen mediante métodos totalmente artesanales, aprovechando avances tecnológicos de controles de calidad y estándares de producción.

Los procesos de elaboración podemos diferenciarlos en destilación, ebullición, infusión y maceración.

DESTILACIÓN

Extracción de todas las propiedades de las plantas por arrastre de vapor en alambique de cobre durante períodos de 18 horas. Posteriormente con un serpentín los vapores, mediante enfriamiento adquieren su estado líquido.

EBULLICIÓN

Introducción de las aromáticas en calderos que contienen agua hirviendo.

INFUSIÓN

Inmersión de botánicos en agua previamente hervida y reposar durante un período de tiempo determinado.

MACERACIÓN

Proceso mediante el cual se incorporan las plantas en soluciones.

NOTAS DE CATA

COLOR: MARI MAYANS Hierbas Ibicencas presenta un color dorado brillante con reflejos ámbar que capturan la luz de manera fascinante. Este tono cálido, que recuerda al resplandor del sol ibicenco al atardecer, es un preludio visual de lo que está por venir. La transparencia del licor, sin ser excesivamente clara, muestra una profundidad sutil que anticipa la complejidad de sus sabores, invitando a adentrarse en la experiencia sensorial con una primera mirada que ya resulta acogedora.

NARIZ: Al acercar la copa, la nariz se ve envolvida por una rica mezcla de aromas mediterráneos que recrean el alma de Ibiza. Las hierbas frescas como el romero, el tomillo y la manzanilla emergen con fuerza, ofreciendo una fragancia verde y herbal que evoca la brisa marina y las montañas de la isla. Con el tiempo, estas notas se suavizan y revelan un toque afrutado sutil, con ligeros matices de cítricos que aportan frescura. Un delicado toque anisado se integra armoniosamente, añadiendo complejidad y redondez al perfil olfativo. Todo esto se complementa con un fondo ligeramente dulce, que hace pensar en los secretos de la naturaleza ibicenca.

GUSTO: Al primer sorbo, el licor se despliega en el paladar con una suavidad envolvente, donde la suavidad del alcohol se combina perfectamente con la calidez de las hierbas. La entrada es fresca y herbácea, pero a medida que el licor recorre la boca, aparecen capas de sabor que van desde lo floral y cítrico hasta lo ligeramente especiado, con toques de anís y un leve retrogusto balsámico que recuerda a los aromas de la isla. El equilibrio entre dulzura y amargor es perfecto, no demasiado empalagoso pero sí lo suficiente para mantener la complejidad y la armonía. El final es largo, con una ligera persistencia herbal que deja una sensación refrescante, limpia y ligeramente cálida, como un suspiro que permanece en el paladar mucho después de haber bebido